Cancún.- En México, la mitad de la pesca es ilegal, lo que significa que uno de cada dos platillos servidos en un restaurante u hotel también lo son, alegó el biólogo José Roberto Velarde Sánchez, quien opinó que para tener verdadera sustentabilidad, estos establecimientos deben tener el valor de dejar de ofrecer toda clase de pescados todo el año.
En entrevista después de una conferencia sobre la acuicultura, el experto señaló que es importante que hoteles y restaurantes puedan decirle a su cliente que en ciertas temporadas del año no habrá cierta especie, porque entró en veda, pero que existen alternativas. Solo así se puede hacer un esfuerzo para cuidar nuestro recurso marino y evitar el colapso de las pescaderías.
“Es un tema de consciencia”, comentó el biólogo, quien dice que, si no lo hacen todos, entonces el esfuerzo de solo unos pocos no servirá de mucho.
Actualmente, muchos chefs insisten en que la pesca debe ser local, creyendo que esto es la “salvación” al reducir la huella de carbono, sin considerar el estrés que añade esta extracción en los ecosistemas.
Por ejemplo, mencionó, hay un mero del Pacífico, llamado baqueta, que puede ser usado en los meses de veda, pero los chefs de Quintana Roo se niegan a comprarlo, por no ser local.
Una opción viable es la acuicultura, pero los chefs se niegan a aceptar la tilapia, que es la única disponible en Quintana Roo de momento.
Existen otras especies que pueden ser cultivadas, pero estos proyectos tienen un alto costo, de entre 10 y 20 millones de pesos, por requerir alta tecnología y especialistas.
Velarde Sánchez indicó que, a pesar de esta barrera, sí puede ser una alternativa viable, de lograrse una asociación con algún hotel para, por ejemplo, usar su frente concesionado de playa para colocar corrales y así obtener la cantidad de pesca que requieren.