José María Morelos.- Ya se ha confirmado un caso de enfermedad por el “mosco chiclero”, la leishmaniasis cutánea, además de existir otras cinco personas bajo análisis, sospechosas de estar contagiadas de lo mismo, declaró Clarita Inés Vázquez Chan, directora del Hospital Integral de José María Morelos.
Este mal inicia como una pequeña lesión indolora en la piel, que si no se trata, puede expandirse y llegar a situaciones graves. En casos extremos, el parásito puede migrar hacia órganos vitales como el hígado o los intestinos.
“El mosquito deposita huevecillos en la piel, y con el tiempo se forma una lesión que puede confundirse con una picadura común. Sin embargo, empieza a tomar un tono rojizo y se forma una costra dorada alrededor, lo que permite al médico identificarla clínicamente”, explicó Vázquez Chan.
Por ser una enfermedad transmitida por un mosquito, quienes trabajan en exteriores están más expuestos a la misma. El actual tiempo húmedo, añadió, favorece igual la proliferación de este vector de contagio.
Es importante que la población local acuda de inmediato a una valoración médica, en caso de sentir alguna lesión extraña en la piel, destacó.