Chetumal. – Habitantes de cuatro comunidades de Othón P. Blanco se manifestaron de manera pacífica afuera de las oficinas de la Secretaría de Desarrollo Territorial Urbano Sustentable (Sedetus) del Gobierno del Estado, ya que las casas por las que les pagaron 27 mil pesos cada uno hace cuatro años continúan inconclusas.
Son en total 140 beneficiados del programa “Vivienda Digna”, en Tres Garantías, Nachicocom, Sergio Butrón Casas y Juan Sarabia, quienes dieron el monto mencionado hace cuatro años. La promesa era que la casa, con sala, cocina, baño y dos cuartos, sería construida un año después y tardaría siete meses en ser concluida.
Esto no fue así, la construcción inició dos años después, pero quedó suspendida a causa de la pandemia, permaneciendo inconclusas hasta la fecha, explicó Reyna Galván Orozco, de Tres Garantías, quien como el resto teme que la actual administración concluya sin entregarles sus casas.
La excusa que dan, explicó, es que el Gobierno Federal canceló el apoyo que les correspondía, pero tampoco se ve que exista inversión estatal; solo el monto que ellos dieron.
Una comitiva de Tres Garantías vino a Chetumal el pasado 15 de febrero y se reunieron con el titular de la Sedetus, Carlos Ríos Castellanos, quien les firmó un documento en el que se comprometía a iniciar un mes después, el 15 de marzo, para terminar en agosto.
“No cumplieron, pero tampoco nos dieron alguna explicación, nada. ¿Por qué no van a los pueblos para que la gente sepa? Si no venimos, no nos enteramos”, se quejó Dibna Cornelio, también habitante de Tres Garantías.
La semana pasada vino un grupo pequeño, quienes hablaron con un funcionario, quien les dijo que ya no había presupuesto para terminar las casas, lo que motivó esta manifestación hoy.
Dibna Cornelio señaló que varios sacaron préstamos o buscaron la manera de aportar el dinero que les pidieron. Ahora, lo que alcanzó a ser construido está deteriorado.
Reyna Galván mencionó que solo cinco personas en Tres Garantías lograron obtener un apoyo de vivienda de 90 mil pesos, con lo que terminaron sus casas. Eso es lo que pide el resto.
Después de la manifestación, un grupo representante de cada una de estas comunidades ingresó a estas oficinas a reunirse con el personal de la Sedetus.
