El número de decesos que dejó el deslizamiento de tierra, en el sur de Etiopía, el pasado 22 de julio, superó las 200 víctimas, informaron las autoridades locales.
Mediante un comunicado, el servicio de comunicaciones de Gofa, informó que el desastre, que ocurrió en la ‘kebele’ de Kencho, en el ‘woreda’ de Geze-Gofa, una región rural y montañosa, provocó la “muerte de 148 hombres y 81 mujeres”, es decir “un total de 229 personas perdieron la vida“.
De acuerdo con Dagemawi Ayele, administrador de la zona, la mayoría de las víctimas fallecieron el día del desastre al quedar bajo tierra mientras ayudaban a los habitantes de una casa, la cual alcanzó el deslizamiento.
Ante el hecho, el presidente ejecutivo de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, expresó su “solidaridad con el pueblo y el gobierno etíopes” a través de X.
El deslizamiento, el cual se se produjo debido a las fuertes lluvias de abril y mayo, se calificó como el más mortífero que las autoridades hayan registrado hasta ahora en Etiopía, el segundo país más poblado del continente africano con 120 millones de habitantes.