Un perímetro de seguridad se activará en París, en las riberas del río Sena, desde hoy hasta el 26 de julio, coincidiendo con la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.
Se espera que unos 326 mil espectadores ―104 mil en lugares de pago en los muelles bajos y 222 mil gratuitos en los altos― asistan a la ceremonia de inauguración en el Sena, la primera en la historia de los Juegos que se llevará a cabo fuera de un recinto deportivo.
Una barrera náutica anti-intrusión está lista en el río, en el este de París, y los sonares ya están instalados en el fondo del Sena.
El ejército francés está desplegando “medios excepcionales” para garantizar la seguridad de la zona de embarque de los 10 mil atletas que participarán en la ceremonia de apertura.
Un batallón de 800 militares especializados está movilizado desde hace cerca de 15 días en una zona de cuatro kilómetros de largo y dos de ancho, en una operación de seguridad que culminará el 26 de julio.
La complejidad se debe al entorno particular, ya que París es muy densamente poblada y el Sena es vulnerable a posibles intrusiones por vía marítima y aérea.
Entre los 800 militares movilizados hay buzos de combate responsables de la seguridad submarina, embarcaciones fluviales que controlan las zonas sobre el Sena, grupos de inteligencia que controlan drones y equipos cinotécnicos encargados de perturbar o desactivar cualquier dron que penetre en el perímetro.
Horas antes de la realización de un ejercicio de patrullaje fluvial, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, el presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos, Tony Estanguet, y el prefecto de la región Isla de Francia, Marc Guillaume, se bañaron en el Sena, en un acto simbólico a nueve días de la inauguración de los Juegos 2024, que incluyen varias pruebas en el río.
Aunque el estado bacteriológico del Sena ha mejorado y su caudal continúa disminuyendo, todavía no está confirmado si se podrán celebrar las pruebas de triatlón (30 y 31 de julio, 5 de agosto), natación en aguas abiertas (8 y 9 de agosto) y paratriatlón (1 y 2 de septiembre).
En un día soleado, con el agua a 20 grados, las bacterias y el caudal disminuyendo, por fin se alinearon los planetas para este baño histórico de personalidades antes de los Juegos.
