El reto en el tema migratorio es cambiar de un enfoque de seguridad nacional que se tuvo en el actual sexenio, muy similar al que tienen las autoridades estadounidenses, a uno con visión humanista, aseguró el diputado federal, Alejandro Robles (Morena).
“El segundo piso de la transformación va a implicar el cambio de paradigma de un enfoque de seguridad nacional, que replica mucho al de Estados Unidos, a uno humanista donde se ponga en énfasis en la protección internacional y se pueda definir a México como un santuario de la migración”, dijo el legislador.
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El legislador, que forma parte de la cuota de acciones afirmativas por migración en la Cámara baja, agregó que faltó voluntad política de su partido para lograr la aprobación de al menos cinco iniciativas que presentó para mejorar las condiciones de personas migrantes tanto connacionales que regresan, como de otras nacionalidades que cruzan el país.
Entre ellas, mencionó que se quedaron en el tintero, pues ni siquiera fueron aprobadas en comisiones, propuestas para dar protección del Estado mexicano de manera automática a niñas, niños y adolescentes migrantes en cuanto ingresan a territorio nacional, crear la figura de trabajadores internacionales para que tanto nacionales como extranjeros en el país puedan laborar legalmente y retornar con sus familias.
Lo que desean muchas personas en situación de movilidad, continuó, es poder, eventualmente, regresar a sus países de origen, y ese, enfatizó Robles, es el enfoque humanista que debe tener la siguiente administración: permitir una migración circular.
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“Durante mucho tiempo nuestros connacionales tuvieron que quedarse atrapados en Estados Unidos porque si salían no podían volver a sus trabajos, esa es la explicación de porque hay 40 millones de personas de origen mexicano en Estados Unidos.
“Hoy México tiene un compromiso a diferencia de Canadá y Estados Unidos, que es el Pacto de Marrakech, que es una migración segura, ordenada, regular, y yo le agregaría circular en que las personas tengan la posibilidad de estando en México, ir a sus lugares de origen, después de haber obtenido una visa de trabajo en Estados Unidos o incluso aquí”, apuntó el morenista.
Robles también se pronunció por la desaparición del Instituto Nacional de Migración y su sustitución por un sistema que tenga el enfoque de movilidad humana que vele por los mexicanos en el exterior y por aquellos extranjeros que quieren hacer del país su patria.
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Por su parte, Elvia Martínez Cosío, también diputada federal migrante, integrante del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC), lamentó que no existe ningún plan ni proyecto para modificar la Constitución a favor de los migrantes.
“Las iniciativas las dejaron en pausa, no se alcanzaron a aprobar porque ya no se citó para aprobarlas. Desafortunadamente no hay un plan, no hay un proyecto; los niños corren mucho peligro.
“Se tiene que hacer un plan serio sobre migración y sentarse no solamente con los legisladores sino también con todos los encargados, la Secretaría de Gobernación y la Secretaría de Relaciones Exteriores”, expresó la emecista.
MSA
