De las 19 secretarías de Estado que conforman el Gabinete federal, únicamente ocho conservan al titular con el que arrancaron al inicio de la administración de Andrés Manuel López Obrador; durante el sexenio algunas renuncias se dieron por desacuerdos con el Gobierno, mientras que las últimas se han dado en vísperas de la sucesión presidencial, que ocurrirá en 2024.
Y es que las renuncias más recientes han sido las de Adán Augusto López, exsecretario de Gobernación, y Marcelo Ebrard, excanciller, parte de sus corcholatas que buscan convertirse en candidatos de Morena a la Presidencia de la República.
Quienes permanecen en sus cargos desde 2018 son los secretarios de Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval; de Marina (Semar), Rafael Ojeda; de Energía (Sener), Rocío Nahle; de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos; de Salud, Jorge Alcocer; de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer; de Cultura, Alejandra Frausto, y de Turismo (Sectur), Miguel Torruco.
La Secretaría de Gobernación (Segob) y la de Hacienda y Crédito Público (SHCP), son las dependencias que mayor número de titulares han tenido.
El sexenio del presidente López Obrador arrancó en 2018 con la ministra en retiro y senadora Olga Sánchez Cordero en la Segob, quien fue sustituida por Adán Augusto López Hernández; actualmente la titularidad es ocupada por Luisa María Alcalde, quien apenas asumió el cargo, luego de reemplazar a Alejandro Encinas, que estaba como encargado de despacho tras la salida de Augusto López, quien busca ser candidato de Morena para 2024.
De las secretarías que han tenido tres titulares distintos desde 2018 destaca la SHCP, que inició con Carlos Urzúa, quien tuvo un desacuerdo con el Presidente y a su salida se convirtió abiertamente en un fuerte crítico de la política económica del Gobierno.
Su relevo fue Arturo Herrera, quien había dejado el cargo para alcanzar la gubernatura del Banco de México, pero su propuesta como tal nunca fue enviada por el Ejecutivo federal, aunque contrario a Urzúa, no se lanzó directamente contra su exjefe, pero sí tuvo momentos como aquella taza que compartió a través de redes sociales con el lema: “Buena historia, ahora muéstrame los datos”; actualmente el titular es Rogelio Ramírez de la O.
Otra salida no exenta de polémica fue la del primer secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), Javier Jiménez Espriú, pues presentó su renuncia al estar en desacuerdo en entregar el control de los puertos a las Fuerzas Armadas.
Fue reemplazado por Jorge Arganis Díaz Leal, quien tuvo que dejar el cargo por motivos de salud. La titularidad de la SICT está ahora a cargo de Jorge Nuño Lara, quien a diferencia de Jiménez Espriú y Arganis Díaz Leal, ingenieros de formación, es licenciado en Economía.
En Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en 2018 estaba al frente Josefa González-Blanco Ortíz-Mena, quien presentó su renuncia debido a un escándalo suscitado por retrasar un vuelo comercial para poder abordarlo, pues iba tarde para llegar al aeropuerto; fue sustituida por Víctor Manuel Toledo Manzur, quien salió haciendo críticas a la política ambiental del Gobierno; actualmente esta cartera es ocupada por Albores González, exsecretaria del Bienestar.
Por la Secretaría de Bienestar ha pasado María Luis Albores González, Javier May Rodríguez y ahora está al frente Ariadna Montiel.
La titular de la Secretaría de Economía (SE) en 2018 fue Graciela Márquez Colín, actual directora general del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), fue sustituida por la diputada Tatiana Clouthier quien severamente cuestionada sobre su capacidad para el cargo, pues su preparación es en Letras Inglesas; el mando ahora lo tiene Raquel Buenrostro Sánchez, que dejó la titularidad del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Por la Secretaría de Educación Pública (SEP) también han pasado tres titulares; el sexenio inició con Esteban Moctezuma, quien salió para ser enviado como embajador a Estados Unidos, movimiento que varios analistas interpretaron como una maniobra para alejarlo de la sucesión presidencial.
Su lugar fue ocupado por Delfina Gómez Álvarez, quien dimitió para contender por la gubernatura del Estado de México y actualmente es gobernadora electa, su lugar es ocupado por Leticia Ramírez, una antigua colaboradora del Presidente, quien en una entrevista a los pocos días de haber asumido el cargo reconoció que no sabía explicar en qué consistía el nuevo modelo educativo que impulsa la SEP.
Con dos relevos en lo que va del sexenio está la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), que dejó Marcelo Ebrard, siendo sustituido por Alicia Bárcena.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) fue inicialmente asignada a Alfonso Durazo, exsecretario particular del entonces presidente Vicente Fox y ahora gobernador de Sonora; su lugar es ocupado por Rosa Icela Rodríguez, de formación periodista y la primera mujer en ocupar ese cargo.
La primera secretaría de la Función Pública (SFP) fue la académica Irma Eréndira Sandoval, quien dejó el cargo en medio de la polémica por supuestamente haber operado políticamente en contra del senador Félix Salgado Macedonio (Morena), para que su hermano Pablo Amílcar fuera el candidato a la gubernatura de Guerrero; el puesto lo ostenta ahora Roberto Salcedo Aquino.
Finalmente, la anterior secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Luisa María Alcalde, dejó recientemente el cargo para asumir la titularidad de la Segob, su lugar lo ocupa Marath Bolaños López.
MANU MILITARI
En el Gabinete presidencial destaca la participación de las Fuerzas Armadas, bajo el mando del general Luis Cresencio Sandoval, de la Sedena, y el almirante Rafael Ojeda, de la Marina.
El Gobierno de la Cuarta Transformación ha entregado al Ejército el control de las empresas creadas para administrar el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), y otra de las tareas que se le asignará es el control de la próxima Aerolínea del Bienestar.
Además, la Secretaría de la Defensa Nacional tiene el control de las aduanas del país, con lo que los militares sustituyeron al personal civil, dependiente de la Secretaría de Hacienda, que se encargaba de esas tareas.
Los militares también se encargan de la seguridad física de Pemex para evitar el robo de hidrocarburos en los ductos y tienen participación en el programa Sembrando Vida.
En el caso de la Marina, esta tiene el control de la empresa del Corredor Interoceánico; además, la Armada entró al negocio turístico, debido a que se le dio el control de las Islas Marías, una exprisión que se convirtió en un complejo cultural y a donde se ofrecen tours.
Los marinos también tienen la responsabilidad de la seguridad de los aeropuertos y administran los puertos del país.
LEG
Con información de 24 Horas