Con una nueva concentración masiva que busque desbordar el Zócalo de la Ciudad de México, el presidente López Obrador busca “reivindicarse” tras las concentraciones realizadas en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) en noviembre y febrero pasados.
Y es que en la Ciudad de México, mantas y pancartas por doquier invitan a a “acompañar” al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, al Zócalo este 18 de marzo, para festejar el “rescate” de Pemex y la CFE.
El evento es atípico, pues la efeméride, en la que se celebra la expropiación petrolera de 1937, no fue motivo de una concentración similar en lo que va de esta administración.
Sin embargo, es la segunda concentración masiva realizada tras una manifestación masiva en defensa del INE y en contra del Plan B electoral impulsado por el Presidente.
La primera fue el 27 de noviembre pasado, luego de la manifestación opositora el 13 de noviembre, mientras que esta segunda manifestación en el Zócalo llega después de la concentración contra el Plan B, el 26 de febrero.
Para Gustavo López Montiel, doctor en Ciencia Política por The New School for Social Research, (New York), el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador está acostumbrado a ser él quien mantenga el control de los espacios públicos en términos de manifestaciones, por lo que cualquier otro actor que le haga sombra lo toma como un daño en términos de autoridad moral.
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En entrevista con 24 HORAS, el especialista indicó que el jefe del Ejecutivo se ha dejado ver cómo un líder que llama a la gente y llena las plazas.
“Es parte de su propia estrategia política en el sentido de no permitir que haya otros actores políticos que tengan las mismas capacidades que él en términos de convocar gente y llenar espacios públicos como el históricamente lo ha hecho”, dijo.
“Tiene que demostrar capacidad política, tiene que demostrar todavía capacidad de confinamiento urgente. Las acciones políticas dentro de Morena y obviamente dentro del Gobierno giran en torno a él. Entonces eso le permite reivindicarse dentro de Morena o mantener el control dentro de Morena, de las decisiones que se están tomando en términos, pues obviamente de candidaturas, de campañas y todo lo que viene en el siguiente año”, agregó.
El también profesor del Tecnológico de Monterrey destacó que la concentración de este 18 de marzo en el Zócalo es una oportunidad para mantener a los grupos dentro de Morena movilizados, pues resaltó que ante las elecciones de éste y el próximo año, requieren mantener cierta disciplina, mantener asentadas a las estructuras y mecanismos de financiamiento.
“Es un financiamiento que en este caso están dando los municipios, los estados , el propio Gobierno federal, es lo que permite que los líderes mantengan autoridad sobre sus grupos. Les permite ingresos que al final de otra manera no tendrían, es una estructura que requiere de muchos recursos, entonces son momentos en los que esos recursos fluyen”, sostuvo.
También destacó que la movilización es una especie de respuesta en el sentido de “ustedes no son los únicos”.
“Y al final, como dijo el Presidente, les falta mucho para ser lo que yo soy en realidad, es tanto en términos de imagen, el Presidente no se puede permitir que haya grupos que se movilicen sin que él esté en el centro”, agregó.
JC
Con información de 24 Horas