Los juzgadores federales rechazaron la propuesta de elegirlos por voto popular y acusaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mantenido un discurso degradante y amenazante contra ellos. Indicaron que de aprobarse la iniciativa, en el país habrá una justicia “servil y populista”.
En un pronunciamiento, que originalmente fue leído por magistrados del Trigésimo Circuito de Aguascalientes, y retomado por la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación, se considera que la reforma judicial significa la destrucción de la división de poderes.
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“En estos años, el Poder Ejecutivo, sin pruebas ni procedimiento ha generado una percepción falsa de nosotros, de nuestro desempeño, degradando nuestra función y amenazándonos mediante un discurso público unilateral”.
Tras los diálogos por la reforma judicial, indica el pronunciamiento que el Legislativo y Ejecutivo siguen con la postura común de cesarlos y “elegir jueces por voto directo, eliminando todo contrapeso político”.
Abundaron que si la reforma judicial “elige jueces por voto popular será destruida la división de poderes ante el interés de agradarles a quien los elegirá”.
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Para los juzgadores del país, “es intencional y perverso mezclar la justicia social y política que corresponden al Ejecutivo y Legislativo con la impartición de justicia que corresponde al Poder Judicial de la Federación”.
Consideraron que la “indignación es general, sostenida, compartida. Si al Poder Judicial le quitan la independencia dejará de ser un control al poder político, será servil y populista y consolidará ideologías y partidos políticos”.
EAM