Playa del Carmen.- De aspecto dócil y temperamento tranquilo, “Maura”, una perrita Golden Retreiver de dos años de edad, tiene una responsabilidad muy importante: detectar posibles explosivos previo eventos de la ciudad. Hasta ahora, para tranquilidad de todos, nunca ha alertado de algún artefacto de estas características.
La mitad humana de este binomio canino, la agente policiaca Hernández, explica que la especialidad de “Maura” es muy distinta a la de los demás perros entrenados, que usualmente detectan narcóticos, por lo que ella no sale con tanta frecuencia a campo.
En lugar de recorrer las calles de la ciudad, o ingresar a paqueterías, “Maura” es llevada a la sede de eventos masivos, para descartar la posible presencia de explosivos. El resto del tiempo, disfruta de la interacción con ciudadanos o con los demás policías, pues es una perrita muy afectuosa.
“Nunca ha detectado nada, lo cual es bueno, pues todo es seguro en Playa del Carmen, en donde contamos con mucha presencia policial”, comentó la uniformada. “Sin embargo, a través de ella, nos aseguramos que esté todo seguro”.
Al igual que el resto de sus compañeros entrenados, tiene sus horarios de trabajo, además de un espacio de descanso, en una cabina especial donde cuenta con alimentación.
Su compañera humana se considera muy afortunada de estar en la unidad k-9, pues “es bonito trabajar con caninos. Te abre mucho la mente, porque hay cosas muy increíbles con los perros, que son animales sumamente inteligentes y leales”, destaca ella.